jueves, 29 de septiembre de 2011

Teatro de luz y sombra



Extraordinaria oscuridad de Pirómano Teatro a partir de Los ciegos, de M. Maeterlink. Textos de: A. Tarkovsky, P. Handke, M. Maeterlink, y propios de los intérpretes. Dirección: Miguel Rojo. Compañía: Pirómano Teatro. Intérpretes: Paco Barcia, Elena H. Villalba, Borja López, Miguel Rodríguez y Nuria Vicent. Lugar: Sala El Apeadero. Granada. Fecha: 23, 24 y 25 de septiembre de 2011

Extraordinaria oscuridad, obra en la que se apuesta de manera decidida por las corrientes menos narrativas de la escena actual, es el ultimísimo trabajo de la joven compañía granadina Pirómano Teatro.
El montaje tiene como punto de partida Los ciegos del simbolista belga Maurice Maeterlinck y se articula como un pastiche de textos de A. Tarkovsky, P. Handke y de los propios intérpretes; una mezcla que se vislumbra, igualmente, en las herramientas utilizadas para la puesta en escena, provenientes del teatro de sombras, la performance o la danza. Pirómano Teatro parte de su historia personal y de la ceguera, compartida con los espectadores por medio del efecto de inmersión, para señalarnos las brechas abiertas entre la identidad personal y la búsqueda del otro a través de un registro deliberadamente poético.
El espacio escénico de factura simple: una percha donde colgará un vestido y una bombilla que toca el suelo, además de los propios actores; ayuda a las linternas y a los objetos, cuidadosamente elegidos, a crear diversas atmósferas a partir de las sombras.
El director de la pieza, Miguel Rojo, parte de simples ejercicios de expresión corporal para crear algunas de las acciones más potentes del montaje; cinco actores recorriendo la oscuridad, rota por el latir intermitente de sus linternas; frases escritas en tiza, péndulos de luz, etcétera. En la parte final de la representación una de las actrices creará, con ayuda de una tenue luz roja, una vanitas contemporánea (elemento cargado de significación y cuasi resumen del montaje); mientras otro de los intérpretes vomita a la manera de un feriante un texto de Handke que va perdiendo, poco a poco, su significado.
Los actores, provenientes del teatro de improvisación, se enfrentan en este montaje a algunas de las limitaciones propias de su formación, acentuadas a la hora de sostener un hilo argumental entretejido con textos de diferentes naturalezas y registros, acompañados de acciones diversas.
Pirómano Teatro se arriesga con hermosura y rigor fuera del campo de la improvisación; su ópera prima en el teatro de creación nos recuerda que no debemos perderlos de vista.

Irene Ochoa